lunes, 3 de octubre de 2011

meditación cristiana

Al meditar dos veces al día,logramos equilibrar lo cotidiano con el espíritu.Separamos la paja del trigo,no en términos de juicio,sino para elegir lo que más nos conviene para nuestro avance espiritual.Entramos en nuestro corazón donde mora el silencio,que trasciende toda lógica y especulación mental.Este silencio profundo nos prepara para entrar en comunión con la Presencia del Dios Amor.Este es el conocimiento amoroso que trasciende a nuestro proceso mental,que deforma las cosas.Los sabios cabalistas,relacionaban las letras con valor numérico(gematría),las palabras con igual gematría se contienen entre sí.Esto pasa con  las palabras:Ahavah (amor) y Ejád(unidad).Ambas suman trece,por lo tanto se relacionan el amor con la unidad.Sabemos que cuando juzgamos,dejamos de amar,y nos separamos de la unidad de todas las cosas .Es una alegría encontrarlos.Martín Mardeus

1 comentario:

Lucia dijo...

Hola Martín:
Muchas gracias por poner este servicio a disposición de nosotros - darnos la oportunidad de encontrar estos signos de su Amor - para así perseverar en nuestro camino.

Mientras más profundizamos en el compromiso de meditar, más evidente es la Gracia de Dios que también nos impulsa a compartir este gran regalo.

Gracias por tu dedicación - el blog es hermoso!